Antes era mas fácil.
Pero lo cierto es que nunca lo ha sido.La promoción de la Optometría profesional como lo deseamos ejercer, es mas bien un tema utopico, pero loable y concreto.
Lo que hace falta es, como siempre, difusión y recursos.
En algún momento de mi vida, quise extrapolar mis esfuerzos palidos contra un sistema que cada vez que reconozco, más me desilusiona.
Hay muchos que han logrado entrar al sistema, solo para convertirse en parte del problema.
Y el problema es el sentido común.
No pagaria por algo que ya es gratis.
Y muchas personas piensan lo mismo, desafortunadamente, algunos compañeros en un afán de riqueza desmedida e incluso, algunos dentro de nuestras propias casas, regalan un trabajo que no debería ser gratis.
Pero ¿están en un error? o, ¿yo estoy en un error?.
La proliferación desmedida de los llamados prácticos es solo una confrontación a mis ideas actuales y lo que es peor, a ellos les va mejor.
Es posible que antes era más fácil.
Pero no quiere decir que con nuestros tiempos actuales las cosas no puedan realizarse.
Aún falta mucho por hacer, por ejemplo, aquí en Tabasco, la tierra del pejelagarto y el pozol, de los tamalitos de chipilin y de caminito.
Donde la cultura es algo que solo pasan los domingos a las 10 de la noche en la radio, donde la gran mayoría de la población padece de una dislexia impresionante, donde leer, es un hábito que nadie se pone.
Y aquí, hablar de Optometría del comportamiento, de lentes de contacto para niños, de pruebas funcionales, de rehabilitación visual, me ha dejado en muchos aprietos, la formula mágica, la varita de Griffindor que pudiera ayudarme a reforzar el entendimiento de mis coterraneos, aún no encuentra su pluma ni su mago.
He de decir, que a lo mejor escribo por que ultimamente he tenido mucho tiempo libre, pero esto es solamente un recuerdo a mi propia lucha, la de prevalecer, y de repartir mejor mis tarjetas antes que curriculums, como leí recientemente en el Facebook.
No es necesario ser mago para saber que, independientemente de la región que habite, en la gran inmensidad del País, carecemos de una cultura global que me ayude o que nos ayude.
La inmensidad de los legos, nos hace pensar que todo esfuerzo debe tener su resultado en algún punto de la vida.
Por el momento, no prendere el clima, ni la luz, ya que el consumo, no perdona.
